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La Nueva Tv es generadora de antivalores en los jovenes.

Jersey shore es el último éxito televisivo del canal MTV, en este nuevo reality show se muestra la vida de ocho personajes que comparten un verano en la costa del estado del New Jersey (Estados Unidos). Estos jóvenes entre los 21 y 28 años viven, trabajan y se divierten enfrente de las cámaras. Tienen en común el autodefinirse como "guidos", que no es más que la modernización y estereotipación de los ítalo-americanos. Aunque no esté bien delimitado el significado de la palabra "guido", los podemos reconocer como personas extremadamente preocupadas por su apariencia física, que comparten una estética y utilizan una jerga específica. Esta serie, ocupó el primer puesto de raiting en EU en la franja de 12 - 34 años, y rompió el record de audiencia de una serie producida en MTV (como podemos ver en el extenso articulo que se le dedica en Wikipedia).

Aún cuando el atractivo de esta serie es innegable, es necesario hacerse una pregunta. ¿ Qué es lo que nos resulta tan atractivo? Pues pese a que no tenemos mucho en común con estos personajes, sus vidas, sin se en lo absoluto excepcionales nos resultan fascinantes . El éxito de este programa, que parece una mezcla de "The Real World" con "Growing up Gotti", es una muestra de que mientras más vacío, obvio y sórdido sea el programa más deseado en verlo y mayor cobertura se le da. Su preferencia entre el público joven sólo lo hace más preocupante, pues se imponen una serie de antivalores amenizados con vodka que probablemente termine en un incremento de las enfermedades venéreas.

¿ A dónde estamos yendo como sociedad cuando nuestros niños idolatran a un grupo de promiscuos desempleados que no recuerdan la sobriedad?

Para intentar hallar respuesta a estos interrogantes, es necesario cuestionarse la finalidad de la cultura popular, y para hacer esto, es necesario volver sobre lo estudiado por la teoría crítica de la Escuela de Frankfurt.

Según un articulo de la revista Signo y Pensamiento, llamado "Comprensión científica de la comunicación", la cultura considerada también como ideología, está destinada a conservar y justificar las condiciones de una sociedad de consumo que responde a un sistema de cosificaciones del individuo. Podríamos deducir entonces que el consumo de esta nueva tele-basura, lo que pretende es mantener un modelo establecido de sociedad, más no que sea a través de la exposición de modelos que de se imitados llevarían la raza humana a su inevitable extinción. Las tradiciones, los vínculos familiares los lazos familiares tienden a romperse debido a que lo que estamos viendo son los "beneficios" de la independencia, los placeres de una vida banal a la que rápidamente la juventud se acostumbrara así la veamos tan lejana como aparece en la televisíón.

Aparentemente, ver este tipo de programas nos muestra una realidad tan ajena a nosotros que nos impide reflexionar sobre nuestra realidad y proponer cambios significativos. Ahora, una vez aclarado esto tenemos que cuestionarnos por qué se ha deteriorado la forma de someter a las masas, pues ya no es suficiente encerrar a ocho borrachos dentro de una casa, ahora es necesario sumarle a eso estereotipos, componentes sexistas, y de ser posible con algo de racismo tal cual se muestra en Jersey Shore. Al igual que componentes tan difíciles de manejar como lo son alteraciones dentro de la dieta alimentario com oes de fácil bajar de peso volviéndose anoréxia  o bulímica, o como es de fácil bajar las cosas sin hablar y sólo sometiéndose a vulgares peleas y riñas callejeras.

La televisión ha tenido un retroceso en su afán por entretener, y la única forma de explicar eso es que cada vez encontramos más encantador lo obvio y políticamente incorrecto. Quizá nuestra estupidez televisiva no es resultado del sometimiento sino de un proceso de liberación respecto a lo que se nos fue inculcando como correcto.